Cómo mantener sus articulaciones saludables

niño besando a mujer11 de agosto de 2022

La artritis reumatoide (AR) ocurre cuando el sistema inmunitario del cuerpo ataca por error las articulaciones, lo que provoca dolor, hinchazón, rigidez y otros problemas. Por lo general, comienza entre los 40 y los 60 años, pero los niños y los adultos jóvenes también pueden contraerla. Es dos veces más común en las mujeres que en los hombres.

Puede que esto le sorprenda, pero moverse en realidad ayuda a aliviar la incomodidad y la rigidez relacionadas con la AR.

“El ejercicio regular puede mejorar la resistencia, la fuerza muscular, la actividad de la vida diaria y la movilidad”, dice Pooja Kumari, MD, reumatóloga de TMC. “Se prefieren los ejercicios isométricos para las articulaciones con inflamación activa, seguidos de los ejercicios isotónicos”. Estos ejercicios pueden incluir ejercicios de fortalecimiento muscular y flexibilidad, así como ejercicios aeróbicos de bajo impacto como caminar a paso ligero, andar en bicicleta o nadar.

Para algunos pacientes, también se ha demostrado que los ejercicios de alta intensidad como correr y trotar mejoran el estado de ánimo. Antes de comenzar cualquier programa de ejercicios, hable con su médico.

“Desafortunadamente, el ejercicio por sí solo no puede tratar la AR”, explica el Dr. Kumari. “Se pueden recetar medicamentos para aliviar el dolor y la inflamación de la artritis y retardar la actividad de la enfermedad. Además, se pueden recomendar dietas antiinflamatorias, que incluyen alimentos ricos en antioxidantes como el pescado y las verduras”.

¿Qué es la artritis reumatoide?

El diagnóstico de la AR puede ser difícil, ya que el inicio y los síntomas pueden ser diferentes para diferentes personas. Puede afectar cualquier articulación del cuerpo, especialmente las muñecas y los dedos. Para algunas personas, los síntomas pueden ser leves y aparecer y desaparecer; otras personas pueden experimentar síntomas graves. Puede afectar a otros órganos, incluidos los ojos, la boca y los pulmones. La AR también puede aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas que conducen a enfermedades e incluso a la muerte.

Fumar aumenta el riesgo de AR, particularmente de AR deformante severa, así como de enfermedades que causan cicatrización de los pulmones. Si no se trata, la AR puede provocar deformidades graves de las articulaciones, así como la afectación de otros órganos, por lo que el reconocimiento y el tratamiento tempranos son esenciales.

“Afortunadamente, tenemos excelentes medicamentos para tratar la AR, administrados de formas tan diferentes como píldoras, inyecciones e infusiones intravenosas”, dice el Dr. Kumari. “Estos medicamentos ayudan a calmar el sistema inmunológico del paciente. Todos los medicamentos tienen efectos secundarios, por lo que todos requieren un estrecho control de sangre y un seguimiento con un reumatólogo”.

Para las personas con limitaciones funcionales significativas, la cirugía de reemplazo articular puede ser una opción. Independientemente, el objetivo del tratamiento es aliviar los síntomas, reducir las complicaciones a largo plazo y promover el bienestar general para que las personas con AR puedan disfrutar de una vida feliz y activa.